El empresario Trinitario Betoret conoció Almuñécar de casualidad durante su viaje de novios en 1968. Desde entonces, ha apostado por la localidad con diversos proyectos de vivienda joven o complejos hoteleros. Hoy charlamos con Trinitario, cuya cualidad más destacada es sin duda la paciencia. En 1999 compró una gran finca para construir su Hotel Cortejo Andalucía. La administración lo detuvo cuando estaba próximo a su terminación y aún guarda la esperanza de verlo acabado y en funcionamiento. Ahora, en 2025 y con el drama de la vivienda en aumento, ofrece otros terrenos para construir 40 viviendas
¿Qué solares pone a disposición para la construcción de casi 40 viviendas?
Disponemos de dos solares en la Carretera antigua del Suspiro del Moro, dirección Torrecuevas, que están junto al resto de solares que ya ofrecimos al Ayuntamiento. Esto no es nuevo, llevamos tiempo intentado construir, pero la legislación lo impedía, así que las condiciones no eran favorables. Ahora todo está cambiando. Con la presión que está viviendo la vivienda y las condiciones tan complicadas de adquirir una casa, la situación está cambiando. Proponemos la construcción de 39 viviendas, y eso no queda ahí, ya que hemos previsto que el Ayuntamiento podría acabar construyendo más de 100 viviendas en ese emplazamiento.
¿Hablamos de vivienda joven? Al final es usted un empresario y debe obtener beneficio de la operación.
Pienso que el empresario no tiene que buscar siempre el máximo beneficio. Obviamente una empresa no debe perder dinero, pero obteniendo unos resultados prudentes es suficiente. El precio mínimo sería más que suficiente: hemos calculado que el coste final de las viviendas podrían estar en torno a los 170.000 euros, al principio. Si hacemos cálculos, la hipoteca a 30 años sería de unos 400 euros al mes. Y si a eso le sumamos que podrían beneficiarse de ayudas de la Junta de Andalucía o del Ayuntamiento, facilitaría en gran medida la adquisición.
La Junta de Andalucía debe estar de acuerdo con el cambio de uso del terreno, ya que ahora mismo no se podría construir ahí.
Actualmente estamos en conversaciones con distintas administraciones. Hemos solicitado entrevista con la Consejera de Fomento para acelerar el proceso. Si se puede llevar a cabo, bien, si no, pues no. Esto debe contar con un beneplácito tácito. Aunque estamos en conversaciones con todos los organismos, la Consejera es la responsable directa. Si se terminan cambiado los usos, pongámonos a construir.
Vamos a hablar del Hotel Gran Cortijo Andalucía. Las obras siguen paradas desde hace años. ¿Alberga esperanza de verlo terminado?
Mi mujer dice que tengo la paciencia del santo Job. No olvidemos que este proyecto se inició en 1999. En ese año yo pensé que se acabaría en apenas 5 años y han pasado 25, pero confío en la responsabilidad social de los políticos y siempre lo tengo en mente.
¿Cuánto invirtió en el Hotel? ¿Cuáles son sus planes para el complejo?
Este proyecto me produce una gran tristeza. Aquello fue una barbaridad puramente política. A alguien no le gustaba ahí arriba y se paró. Cuando nos dijeron que siguiéramos ya se había hecho el daño. Invertimos 8 millones y, años después, incluso lo presentamos en FITUR. Confío en la voluntad política y en la colaboración institucional para terminarlo, yo no tengo los millones que faltan para acabarlo. No obstante, soy hijo de empresario y se que hay que tener paciencia y que siempre hay limitaciones.
¿Qué circunstancias rodean al Hotel Gran Cortijo Andalucía?
Mantenerlo a medio construir ha sido un problema y una pena enorme. El hotel no debe un solo euro a la administración. Estamos hablando de una parcela enorme, de hecho he recibido ofertas para comprarme la finca, pero no me interesa en este momento: me gustaría verlo terminado. Antes hablábamos de beneficios. Pues bien, tampoco me atrae la idea de perder el dinero. Venderlo y deshacerme de él no entra en mis planes. Hay ilusión aún, pero hay realismo. No quiero que nadie me pague el hotel, pero sí pido colaboración. No sería justo que cargara yo con todo después de buscarme una situación que no pedí. Como empresario no puedo tolerar eso.
Habrá llamado a todas las puertas de las distintas administaciones
Quiero hacer un cierto llamamiento a las de arriba y abajo para sentarnos y buscar una alternativa. Quizá al Consejero de Turismo le interesaría visitar el Hotel. Este complejo estaría orientado al turismo de Salud, por sus características. Daría empleo a profesionales de turismo de salud, no solo al personal, también terapeutas, médicos, fisios… que vendrían con cierta regularidad. Constaría de un centenar de habitaciones de gran tamaño pensadas para la comodidad del huésped. Sería una oferta muy interesante y demandada.
La distancia del hotel al centro de ciudad sería muy cercana. Habría circulación.
Creo firmemente en este proyecto turistico en el que he confiado desde hace años y quiero contribuir a que sea una realidad. Yo he creido y creo en su potencial, así como creo en Almuñécar.